Pintamos tus componentes directamente en Kraps, de forma eficaz, controlada y conforme a las normas vigentes del sector. Ya sea imprimación, recubrimiento multicapa o sistemas especiales de protección.
La pintura es un proceso superficial en el que los componentes se protegen contra la corrosión, la intemperie o las influencias químicas utilizando materiales de recubrimiento especiales. Al mismo tiempo, la superficie puede igualarse en color, marcarse o refinarse.
El proceso se utiliza siempre que los componentes se emplean permanentemente en exteriores, en entornos agresivos o en zonas sometidas a gran desgaste. En función de los requisitos, se aplican imprimaciones, capas intermedias y capas superiores -a mano o por pulverización- y se secan en condiciones controladas.
El resultado: una superficie uniforme y resistente con un valor añadido funcional y visual.
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